Subió a su azotea por la necesidad de respirar aire fresco, quería dejar de respirar el humo que salía del cigarrillo que aquel tipo se estaba fumando en la sala de estar. Allí arriba subía cuando se sentía triste, agobiada, cuando quería pensar o sentir cómo el aire le acaricia la cara. La ciudad dormía cuando ella contaba los pájaros que volaban por encima de su cabeza y las horas que quedaban para que el sol saliera un día más.
En realidad, estas frases suenan hasta bonitas contadas de esta manera.. No me imagino otra manera de mitigar la tristeza que subir a lo más alto y arrebujarse entre alas de mil colores (aunque puede que verse tan arriba y a la vez tan abajo sólo lo intensifique)
ResponderEliminarPolvo de estrellas para ti.
ME gusta
ResponderEliminarUn beso
yo para eso tengo mi habitación azul dónde guardo los tesoros y secretos y tiene un ámplio ventanal que da al mar (por eso es la habitación azul)
ResponderEliminar(y aunque de momento no exista, Lobo me ha prometido una, para cuándo nos vayamos juntos lejos, será mi rincón de cuando me sienta agobiada, él dice que será el rincon completamente para mí)
nada como una azotea para respirar...
ResponderEliminarme encanta!
P-R-E-C-I-O-S-O
ResponderEliminar