lunes, 2 de septiembre de 2013

no pido más.

Es irónico no querer que te marches y esté ayudándote a hacer las maletas.
"Quédate" dije, y te quedaste, siempre te quedarás
aunque mis ojos no te vean. Y joder, no pido más.

Cuánta razón con aquello de que la distancia no se mide en kilómetros:
tengo personas cerca y las siento lejos,
y tú estás lejos y te siento más cerca que a nadie.
Por eso sé que te quedarás. Y qué suerte la mía.

3 comentarios:

Dime si sentiste algo al leer las palabras que salieron de mis labios. Puedes conseguir que sonría.