besos en cada esquina de la ciudad,
miradas cómplices y algo temerosas,
nerviosismos en las venas y
dosis de felicidad en ellas.
ciegos, ciegos por un
amor clandestino
que no podéis evitar,
que no queréis evitar.
os amáis, como jamás lo habéis hecho
pero no os percatáis que detrás de
todo esto hay una persona,
de carne y hueso
con emociones y sentimientos
que tiene el corazón partido por vuestro
(maldito)
amor clandestino.
ufffff...
ResponderEliminartu entrada de hoy me ha dolido...
y es que duele el daño que esos amores hacen...
besos!!!
Lanzas puñaladas directas. Buen texto. Beijinhos.
ResponderEliminarGENIAL. Y punto :)
ResponderEliminarDios, me he quedado sin palabras, me ha encantado!
ResponderEliminarnowords
ResponderEliminar