domingo, 22 de mayo de 2011

Hace mucho que siento la felicidad en mi piel y que sonrío.

Escuchar tu voz entre el bullicio de la gran ciudad hizo estremecerme. Habían pasado muchos años ya para que hayas vuelto de nuevo a abrirme esa herida que con tanto esfuerzo cerré. He viajado, he sentido ¡he amado! sí, creí que era imposible después de ti pero vi que no. Hace mucho que me quité la venda de los ojos, hace mucho que siento la felicidad en mi piel y que sonrío. Por ese motivo quiero que si has vuelto para buscarme te des media vuelta y desaparezcas de mi vista, no quiero vivir la vida junto a ti.

6 comentarios:

  1. Vivir la vida con una persona de esa calaña no merece la pena O__O
    Y si se es capaz de sonreir sin necesidad de ese amor tan falso... entonces estamos recuperados.

    Me encanta el título y cada letrita de tu relato :D
    Besos de purpurina, alicia <3

    ResponderEliminar
  2. OH! que texto... O_O me ha encantado!:)
    A veces cuando una perosna se va cuesta tanto olvidarla que cuando lo consigues deseas que no vuelva a aparecer en tu vida.. (en algunos casos por miedo a que reaparezcan los fantasmas del pasado)

    ResponderEliminar
  3. OOH me ENCANTAA!!! la verdad es q una vez que cerramos esa herida,la q nos causo tanto dolor...ya no queremos q se abra por culpa de un recuerdo...duele!
    por q cuesta tanto olvidar...

    un besazooo!!!

    ResponderEliminar
  4. Yo creo que cuándo ese gran amor vuelve, nada importa ya, que esa venda aunque caída deja abrir la herida. Creo que si el gran amor vuelve, no queda otro remedio que darle otra oportunidad, por mucho que haya dolido.

    ResponderEliminar
  5. Creo que, en mayor o menos medida, todos hemos vivido lo que dices en tu texto.
    Eso es lo que lo hace tan mágico.
    : )

    ResponderEliminar

Dime si sentiste algo al leer las palabras que salieron de mis labios. Puedes conseguir que sonría.