-Veo que sigues fumando el mismo tabaco.
-Sí -sonrió- ¿y tú, sigues siendo tan negada a él?
-Exacto, sigo sin poder aguantarlo.
-Veo que no has cambiado en nada, estás igualita que siempre.
-¡Claro que he cambiado!- sonrió.
-¿Ah sí? ¿en qué?
-Pues en lo que sentía hacia ti ¡ya no te quiero!- dijo mientras reía.- ¿O qué esperabas, que iba a estar toda mi vida esperándote?
-Claro que no, no soy tan iluso.
Pero a ella ni se le pasó por la cabeza que en aquel momento había acabado con todas sus esperanzas y le había roto el corazón como nunca antes lo había hecho.
Guau
ResponderEliminarUn beso
Pobre corazón herido...
ResponderEliminarBesos
...porque en realidad lo quería.
ResponderEliminarMás que amor creo que lo que siente es nostalgia al feliz pasado. Pero pasado pisado! :)
Jan.
:( triste..triste.. besos!
ResponderEliminarMe ha encantado tu cabecera. Es genial!
ResponderEliminarLa entrada super bonita y super triste.
Un besin! Te sigo!
A veces decimos frases sin demasiado sentido, que afectan como si se acabará el mundo a la otra persona!
ResponderEliminarBesitos bonita :)
siempre pasa, pero él solo lo dice por decir, porque a él con esa afirmación seguro que también le había roto el corazón.
ResponderEliminarEsas simples palabras han vuelto a acabar con todo, que triste...
ResponderEliminar*Besos
oH, que triste! u.u
ResponderEliminar