martes, 12 de julio de 2011
No importaba donde fuese, lo que sí importaba es que estuviésemos juntos.
Recuerdo una manía bonita que teníamos y era ver el atardecer juntos y agarrados de la mano. No importaba dónde, pero siempre lo teníamos que ver. No importaba si era desde la puerta de una tienda comercial, desde la ventana de una pizzería, desde el césped, desde una catedral. No importaba si era desde una azotea, desde un banco, desde una heladería de París, desde un avión o un barco, no importaba si era desde nuestro coche, mientras hacíamos el amor.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Ayyy, qué bonito! :'-)
ResponderEliminarPues es una manía preciosa
ResponderEliminarMe ha gustado mucho mucho :)
ResponderEliminarTodas las parejas tienen sus manías, y ésta es una genial :)
ResponderEliminarLa foto es preciosa. ;)
ResponderEliminar